Hipertermia significa sobrecalentamiento y también es un método de tratamiento en oncología. Hace más de cien años, los médicos observaron que los pacientes superaban su cáncer tras sufrir infecciones muy febriles. La influencia de la hipertermia en el sistema inmunitario y en las células tumorales se ha demostrado científicamente cada vez más en los últimos años. En la actualidad se han desarrollado diversas formas de hipertermia, de las cuales las siguientes se utilizan en el IOZK:
Electrohipertermia modulada
En la electrohipertermia modulada, la región donde se localiza un tumor o una metástasis se trata con ondas de radio. El paciente se tumba en una cama de agua y se coloca una sonda sobre la zona afectada. Las ondas de radio pueden dañar selectivamente las células tumorales porque su estructura celular difiere de la de las células sanas. En determinadas circunstancias, las células cancerosas producen señales de peligro que, a su vez, pueden desencadenar una reacción inmunitaria contra las células en cuestión. Este proceso se conoce como muerte celular inmunogénica (MCI).
Hipertermia corporal moderada
En la hipertermia moderada de cuerpo entero, la temperatura corporal central se eleva a temperaturas similares a la fiebre mediante radiación infrarroja. La frecuencia cardiaca, la saturación de oxígeno, la presión arterial y la frecuencia respiratoria se controlan continuamente. El aumento de la temperatura puede estimular diversas células inmunitarias, importantes, entre otras cosas, para la defensa contra el cáncer. También hay indicios de que la hipertermia puede aumentar la eficacia de la quimioterapia y reducir parcialmente sus efectos secundarios.